Ninfomanía

¿De qué se trata?

El término ninfómana proviene de ninfa (deidad femenina de la mitología y / o nombre dado a los labios menores de la vulva) e manía (que en latín significa locura). Según la definición del Diccionario De Mauro de la lengua italiana, la ninfomanía es una exageración patológica del deseo sexual en las mujeres. Este es un trastorno bastante raro.

Una noción imprecisa

Determinar qué es exactamente la ninfomanía es una tarea delicada, dado que el concepto de normalidad, en materia de sexualidad, sigue muy ligado a las convenciones sociales, y dado que las necesidades cambian de un individuo a otro. Según psicólogos y psiquiatras, se trata de un sufrimiento ligado a un deseo sexual desenfrenado e insatisfecho a pesar de la multiplicación de las relaciones sexuales o del consumo compulsivo de material pornográfico. ¡Pero tenga cuidado de no confundirlo con la pasión por los placeres de la carne!

Esta búsqueda siempre insatisfecha se convierte en una verdadera adicción y requiere un tratamiento real. A estas alturas, de hecho, el término ninfomanía ha sido reemplazado por otros como adicción al sexo o hipersexualidad.

Los remedios

Psicoterapia: acudir a un especialista para determinar el origen de la propia conducta puede ayudar a deshacerse de la adicción al sexo, evitando sentirse culpable.

Grupos de apoyo: como alcohólicos, bulímicos y drogadictos, incluso aquellos que sufren de hipersexualidad tienen asociaciones disponibles a las que acudir en busca de ayuda. Bajo la supervisión de un terapeuta, se propone seguir un programa de cesación que consta de 12 fases y discusiones con los demás participantes. Esta asistencia es gratuita y se realiza en absoluto anonimato.

Para obtener más información, visite el sitio web de la Asociación Italiana para la Investigación en Sexología (AIRS): www.airs-online.org/.

Es bueno saberlo: se le someterá a un cuestionario inicial para determinar su grado de adicción.

Terapias farmacológicas: se pueden prescribir para mantener bajo control el estado de ánimo del paciente en caso de depresión.

¿Sabía usted que?

El masculino de la ninfomanía es la satiriasis, que proviene del término sátiro, una semideidad de la mitología griega.

Durante el siglo XIX, el barón Richard Von Kraftt Ebing, psiquiatra austrohúngaro, no dudó en hablar de la ninfomanía como una enfermedad grave, si no fatal.

En ese momento, las mujeres que sufrían de un apetito sexual desmesurado, juzgadas demasiado feroces por las normas sociales, incluso eran internadas, mutiladas sexualmente o expulsadas de la comunidad.