Rinoplastia: que es y como funciona

La rinoplastia se realiza para remodelar la estructura ósea y cartilaginosa de la nariz y darle proporciones más armoniosas, pero los fines estéticos nunca pueden separarse de los funcionales. En cualquier caso, hoy esta intervención es mucho menos invasiva que en el pasado y la recuperación posquirúrgica también es más rápida, gracias a los nuevos tratamientos a base de ácido hialurónico.

Cuando se trata de rinoplastia, la creencia generalizada es que se trata de una intervención destinada en la mayoría de los casos únicamente a mejorar un aspecto de la nariz que no satisface por motivos de forma, tamaño u otros. En cambio, la realidad es completamente diferente, como explica el Dr. Francesco Klinger, Jefe de Cirugía Plástica en el Hospital San Giuseppe de Milán - Grupo Multimedica, porque el objetivo principal de la intervención debe ser siempre respetar y, posiblemente, mejorar la función respiratoria, en perfecto acuerdo con un refinamiento estético: una nariz armoniosa y natural, con proporciones y ángulos correctos, también podrá funcionar de manera óptima.

Entre las causas que determinan con mayor frecuencia la necesidad de intervención se encuentran sin duda los traumatismos faciales, pero también las desviaciones del tabique de origen no traumático pueden resolverse con la rinoplastia. Por tanto, si por un lado la distinción entre rinoplastia estética y funcional parece hoy decididamente desactualizada, por otro lado la mejora de las técnicas quirúrgicas la ha convertido en una operación sencilla, sumamente segura y bastante extendida, y no solo entre las mujeres: hoy alrededor del 40% de las intervenciones se refieren al sexo masculino.

¿En qué consiste la intervención?

Dependiendo de las necesidades del paciente, son posibles dos abordajes quirúrgicos diferentes: rinoplastia cerrada y abierta.

Rinoplastia cerrada: proporciona, con acceso desde las fosas nasales, la realización de pequeñas incisiones en el interior de la nariz con las que el cirujano tiene la oportunidad de intervenir sobre huesos y cartílagos modificando la estructura del esqueleto.

Rinoplastia abierta: más invasiva que la técnica "cerrada" y reservada para correcciones más complejas, la rinoplastia abierta se realiza incidiendo el segmento de cartílago que separa las fosas nasales (columela) del exterior. De esta forma, el cirujano puede controlar el resultado de la cirugía de forma más directa.

La operación, que se realiza con mayor frecuencia bajo anestesia general, tiene una duración promedio de una hora, pero puede oscilar entre un mínimo de media hora y un máximo de 2/3 horas, y en muchos casos se requiere una noche de sueño.

Tiempos de recuperación

En primer lugar, la mejora continua de las técnicas quirúrgicas garantiza ahora una recuperación postoperatoria extremadamente corta: la cicatrización del hueso y del cartílago suele tardar entre 7/8 días, durante los cuales la nariz está protegida por un aparato ortopédico rígido; después de este período, se requieren otros diez días para la recuperación de la funcionalidad normal de la mucosa nasal. La reanudación de la actividad física intensa suele tener lugar en 2/3 semanas.

Aunque tiende a ser conservadora, la rinoplastia sigue siendo una intervención quirúrgica que altera la integridad de la mucosa nasal y en particular de ese mecanismo fundamental para el bienestar respiratorio llamado aclaramiento mucociliar, que ayuda a la eliminación de secreciones. Sin embargo, el Dr. Klinger subraya que, desde este punto de vista, una ayuda válida proviene de los tratamientos de que disponen los pacientes en la actualidad, o de nuevos dispositivos prácticos con los que es posible realizar nebulizaciones nasales de ácido hialurónico al 0,3% capaces de lubricar y revitalizar la mucosa, favoreciendo una pronta recuperación funcional de la nariz. Garantizando una rehabilitación más rápida, gracias a su acción bioestimulante que facilita la cicatrización y la regeneración celular, el ácido hialurónico utilizado en el postoperatorio es, por tanto, un elemento altamente innovador, que ha hecho que la rinoplastia sea significativamente más "aceptable" por los pacientes.

Se sabe que el ácido hialurónico es una sustancia normalmente presente en nuestros tejidos, fundamental para su elasticidad; la característica preciosa de la administración por nebulización, sin embargo, es la de hacer disponibilidad inmediata a nivel de la mucosa nasal. Para recuperar el bienestar respiratorio completo, suelen ser suficientes 15/20 días de nebulizaciones diarias, a partir del tercer día siguiente a la cirugía.


En colaboración con Il Portale della salute

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