Rihanna engordó? Y la prensa, como siempre, está en su peor momento

De nada sirve negarlo: cuando vemos una estrella con unos kilitos de más, no podemos dejar de notarlo, sobre todo si la citada estrella siempre ha hecho de su imagen y cuerpo su seña de identidad. Lo que no es natural, sin embargo, es que la prensa, en cualquier nivel y sector, intervenga, sin la más mínima ética profesional, con una serie de juicios ignominiosos y rayanos en la decencia que ponen el énfasis exclusivamente en la fisicalidad.

Hija de una cultura dominada por los hombres que todavía ve a las mujeres como un objeto, aunque trata de negarlo a través de una promoción cada vez más generalizada e hipócrita de la belleza curvilínea, la prensa, italiana y extranjera, parece seguir sin aceptar la belleza femenina que no promueve la perfección y el cumplimiento de tarifas específicas. En resumen, el dicho "predica bien y rasca mal" siempre se aplica: si de hecho, por un lado gastamos artículos sobre la "importancia de la autoaceptación y sobre el" elogio de las mujeres curvilíneas y normales, por el otro estamos todavía en el punto en el que si una mujer engorda, no podrá perdonar.

Esta vez en la mira de la vergüenza corporal de la prensa ha terminado la cantante Rihanna, estrella del pop entre las más queridas y seguidas del planeta, quien en el último período parece haber mostrado un físico más suave y redondo. El tamaño se ha convertido en una suculenta noticia para muchos periódicos y webs -incluso de bastante autoridad- que no se limitaron a dar la información de portada imperdible, sino que aderezaron todo con una mirada ignominiosa y machista que dependía exclusivamente de la acumulación de kilos y la pérdida de su forma física conocida. "Gran deterioro físico", "Mira cómo se reduce", "Va así luciendo", "¿Falta de" cariño? "" Físicamente en pedazos " Estos son solo algunos de los términos que los periodistas han utilizado para describir el cambio físico del cantante. Afortunadamente, en medio de tanto ruido, hubo una gran movilización de los fanáticos de la cantante que defendieron a su heroína a través de las redes sociales, elogiándola por su capacidad para ser una mujer normal y mostrarse por lo que es.

En definitiva, “otra mala figura de cierta prensa que parece no poder evitar hacer un gol en propia puerta. Lo que uno se pregunta es: ¿habrían hecho lo mismo medios y periódicos si hubiera sido un hombre? Cuál es la respuesta.