Masaje Shiatsu

El origen

Shiatsu, que literalmente significa "presión digital", es el masaje japonés. Influenciado por las técnicas chinas, evolucionó a lo largo de los siglos hasta convertirse en lo que conocemos durante el siglo XIX. Ampliamente practicado en la tierra del sol naciente, solo llegó a Occidente en la década de 1960. Su éxito fue inmediato y, desde entonces, nunca se ha desvanecido. Como otras terapias orientales, el masaje shiatsu tiene como objetivo restaurar la circulación de la energía vital (QI) en el cuerpo, aunque en este caso esto no ocurre con la ayuda de agujas, sino con los dedos. Según esta medicina milenaria, el cuerpo humano está atravesado por líneas esenciales, llamadas meridianos, por las que circula la energía, y está salpicado de puntos específicos, lugares de encuentro de los vasos linfáticos y glándulas del sistema endocrino. Cuando se altera o bloquea la circulación de la energía, pueden aparecer disfunciones corporales, dolor, fatiga ...


El ritual

Ver también

Masaje casero anticelulítico: así es como se hace

A diferencia de la mayoría de los masajes, el shiatsu se realiza mientras se está vestido, con ropa interior o un sello suave y cómodo, y no usa aceite. Después de colocar su mano sobre el hara, el centro de energía vital ubicado debajo del ombligo, el experto habla con el paciente y lo observa, para identificar la presencia de cualquier disfunción. A través de sus manos, puede sentir qué áreas están más tensas que otras. Siguiendo un ritual preciso, jugando con el peso de su cuerpo y con la gravedad, el masajista actúa sobre todas las partes del cuerpo (desde los pies hasta el cuero cabelludo), aplicando presión con los dedos sobre las zonas que ha identificado. Según lo que sienta el paciente, las presiones serán más o menos profundas y el masajista se demorará en las zonas disfuncionales, alternando movimientos dinámicos, útiles para estimular la parte, con movimientos lentos, que sirven para relajarla. Al final de la sesión, podrá relajar las extremidades.


Los beneficios

A diferencia de los masajes de puro placer, el shiatsu es preventivo y curativo al mismo tiempo. Si se practica con regularidad, asegura al paciente el aporte de energía permanente, refuerza las defensas inmunológicas y el bienestar general. Aquí está su poder preventivo. Puede convertirse en un hábito, en parte del propio estilo de vida, como la nutrición, la relajación, la actividad física ... Si se practica con regularidad, incluso puede aliviar cualquier dolor o disfunción del cuerpo sin recurrir a medicamentos. El objetivo del experto, por tanto, es encontrar el punto de apoyo de la tensión (que no siempre es lo que se supone que debe hacer), el punto donde se bloquea la energía. En una o más sesiones, el masajista puede aliviar el dolor de espalda, las migrañas, los dolores digestivos, aliviar la fatiga y mejorar la moral y la forma del paciente.

Etiquetas:  Noticias - Gossip Antiguo De Lujo Estrella