Enamorados desde hace 50 años: el Coronavirus los separa y los médicos los reúnen

En salud y en enfermedad. Giorgio y Rosa lo saben bien, casados ​​desde hace más de 50 años y ambos hospitalizados en Cremona por COVID-19. Él, el 17 de marzo, ella unos días después, en otro departamento, el de Cirugía Multiespecializada. "Quiero volver a casa con mi Rosa", este es el deseo expresado en varias ocasiones por el hombre al equipo médico que lo atendió. En ese momento, la soledad se sumó al dolor físico, sentimiento del que siempre se había conservado gracias a la presencia constante de Rosa, el amor de su vida. El llamamiento de Giorgio, "una de esas personas a las que no puedes evitar apegarte", como lo define un médico, no pasó desapercibido y, así, dos médicos trabajaron para reunir a la pareja de enamorados.

Respetando el protocolo del hospital, marido y mujer fueron llevados a la misma habitación, donde, sorprendentemente, pudieron - finalmente - abrazarse nuevamente. Su encuentro, por un momento, detuvo el tiempo y nadie, entre médicos y enfermeras, pudo contener las lágrimas. Giorgio y Rosa, después de interminables días, separados el uno del otro, se encontraron en un abrazo, en una caricia, en la enésima declaración de amor, la real, con A mayúscula.

Su historia nos muestra que no hay obstáculos demasiado altos para superar ni mal tiempo demasiado fuerte para soportar, cuando el deseo de estar juntos es más fuerte que todo lo demás.

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