Defensas inmunes en los niños: ¡6 formas efectivas de fortalecerlas!

Fortalecer las defensas inmunológicas de los bebés es una excelente manera de tratar de evitar que pasen los meses fríos a merced de la gripe, el dolor de garganta, la tos, la fiebre y el resfriado.

Para proteger a su hijo de las dolencias estacionales y reducir significativamente su riesgo (que aumenta cada vez más entre la escuela y el jardín de infancia), es necesario fortalecer sus defensas inmunológicas. ¿Cómo hacerlo? Aquí hay 6 formas realmente efectivas, todas para poner en práctica.

¡Antes de continuar con la lectura del artículo, mira este video del que puedes obtener algunos consejos útiles para cuidarte y sentirte bien contigo mismo!

Ver también

Creatividad en los niños: ¡6 sencillos ejercicios para estimularla!

Psicomotricidad para niños de 0 a 6 años: todo lo que necesitas saber

Urticaria en niños: ¿cuáles son las causas y los remedios más efectivos?

1. Fortalece las defensas inmunológicas de tu bebé cuidando su nutrición

Una dieta saludable es fundamental para fortalecer las defensas inmunológicas de su hijo.

Eduque a su hijo para que consuma más porciones de frutas y verduras al día, además de legumbres, cereales integrales y frutos secos, ¡una auténtica panacea! Manténgalo alejado de las bebidas gaseosas, los dulces envasados ​​y los jugos de frutas industriales tanto como sea posible, tratando de prepararle jugos recién exprimidos y pasteles caseros. En su dieta abunda en fuentes de vitamina C, muy útil para fortalecer el sistema inmunológico (la puedes encontrar en abundantes cantidades en cítricos, kiwis, fresas, pero también espinacas y brócoli). Aquí tienes un álbum de comidas que no debes perderte:

Ver también: Alimentos que fortalecen el sistema inmunológico: 10 súper alimentos para enfrentar el invierno

© iStock Alimentos que fortalecen el sistema inmunológico

2. Empiece a usar un inmunoestimulante de inmediato para reforzar sus defensas.

Para apoyar las defensas inmunológicas de su bebé, es muy útil comenzar a usar un inmunoestimulante lo antes posible. Elige un complemento alimenticio diseñado específicamente para niños y fácil de administrar que posiblemente contenga Vitaminas C, D, E e incluso Zinc, todo ello imprescindible para asegurar un normal funcionamiento del sistema inmunológico.
¡Su hijo estará listo para enfrentar el regreso a clases y la temporada de frío de la mejor manera posible!

3. Haz que duerma bien y duerma lo suficiente

La calidad y la cantidad de sueño también son importantes para evitar que su bebé se enferme fácilmente. La falta de sueño, de hecho, lo debilita, exponiéndolo más a gérmenes y bacterias.

Un niño entre 1 y 3 años debe dormir entre 12 y 14 horas diarias; uno entre 3 y 5 entre 11 y 13; niños entre 5 y 12 años entre 10 y 11 horas. Si su hijo no duerme lo suficiente, no solo disminuirán sus defensas inmunológicas, sino también su capacidad de concentración, lo que lo pondrá más inquieto. Así que tenga cuidado de no irse a la cama demasiado tarde y asegúrese de que él cene al menos dos horas antes de irse a dormir.

4. Haz que tome el sol incluso en los meses fríos.

¿Quién te dijo que en los meses más fríos no puedes quedarte al aire libre? Por supuesto, debes tomar las precauciones adecuadas, pero un poco de sol solo puede ser bueno para tu bebé.

De hecho, la luz solar ayuda a fijar la vitamina D, que juega un papel muy importante en la prevención de enfermedades estacionales. Un paseo al sol el domingo solo puede ser bueno para el niño, incluso con una bufanda y un abrigo.

5. Eduque a su hijo para que siempre se lave las manos

Y aquí estamos con la regla de higiene número uno: lavarse siempre las manos en cuanto regrese a casa, este es un hábito realmente fundamental para mantener a raya a los gérmenes y enfermedades.

Enséñele a su hijo a mojarse las manos, distribuir el jabón en la espalda, palma, espacios entre los dedos, frotar bien y enjuagar, sin prisas. Elija siempre un limpiador suave para sus manitas.

6. No lo sobrecargues con compromisos

¡Los niños de hoy, la mayoría de las veces, tienen más compromisos que un adulto! Escuela, tarea, deporte, curso de inglés, etc., etc. El riesgo es sobrecargarlos y crear un cierto estrés psicofísico, que inevitablemente debilita el organismo y las defensas inmunológicas.

Déle a su hijo algo de tiempo libre para jugar, contarle una historia, cocinar con él, dejar que se relaje como quiera. ¡Las tensiones desaparecerán, se enfermará menos y su rendimiento también aumentará en todos los campos!

Etiquetas:  Antiguo De Lujo Amor-E-Psicología Estilo De Vida