¿Perro o martillo neumático?

La señora que cocinaba estos bizcochos deseaba atraer a toda la familia a la cocina gracias a su olor, pero el primero en aparecer en la cocina fue su perrito: disfrazado de un auténtico martillo neumático muy divertido, el pequeño salta. ¡Como un loco, esperando en vano poder agarrar un dulce para él solo!

Ver también El perro que sonríe